Hace un mes me lamentaba de que el big data iba a hacer imposible que Leo Messi cobrara un penalty a lo Panenka. La semana pasada Messi demostró, una vez más, que para él no hay imposibles. De todas las ejecuciones que Antonin Panenka ha visto de su cobro original, certificó la de Messi como la mejor que ha visto hasta ahora. Esta entrada debí publicarla la semana pasada pues el tiempo gira más rápido en el universo Messi. Lo que hizo ayer volvió a llevarnos al éxtasis a los aficionados al fútbol.
Rebobinemos: marzo de 2009. Pregunta: Y bueno, ¿qué pasaría si Guardiola se enfrentara a este Barcelona dirigiendo al Bayern Munich, por ejemplo? Un experimento tan improbable para entonces como preguntarse que qué pasaría si Xabi Alonso jugara en el Bayern y Toni Kroos en el Real Madrid. De regreso al presente: anoche se libraba el auténtico combate del siglo. Guardiola se enfrentaba a su propio invento, al equipo que lo ha hecho uno de los mejores entrenadores del mundo, su casa durante más de 30 años. Es muy probable que Guardiola sea el único entrenador que es socio del club al que enfrentaba. Había más duelos: el tridente Messi, Suárez y Neymar contra el mejor portero del mundo; Xabi Alonso de nuevo contra el Barça; los hermanos Alcántara uno frente al otro; Guardiola frente a Messi, o a quién se le deben los triunfos del mejor Barça de toda la historia.