Todos lo hacen

Dentro de las excelentes obras literarias de formación, una de mis preferidas y que creo esencial en la adolescencia por la impronta que deja es Un enemigo del pueblo, de Ibsen. Enseña sobre todo el valor de defender la verdad y lo ético aún a pesar del deseo o la voluntad popular. La fortaleza para discrepar aunque todo el mundo abogue por el derecho consuetudinario, aunque la respuesta ante algo indebido sea pero si todos lo hacen.

De las veces que me he encontrado con esa frase en mi vida puedo decir que siempre que se pronuncia es porque oculta algo que quien la enuncia sabe que está mal. Recuerdo que la escuché cuando se demostró que la campaña de Samper fue financiada por los narcos. Pero si todos lo hacen, me dijeron algunos amigos como defensa de Samper. Absurdo, insólito, pero así lo afirmaron. De una de esas amigas tuve que escuchar de nuevo esa frase en otro caso y otro contexto, en una institución donde la mayoría se prestaba para pasar sobrecostos ficticios a la administración pública –con aquiescencia del tesorero. Todos lo hacen, me dijo ella cuando le conté lo que estaba pasando. La justificación era también absurda. Me gané muchos enemigos por no hacerlo. Debo a Ibsen haber salido limpio de esa olla –aunque con la culpa de no haberla denunciado. Pero Cundinamarca no es Dinamarca y yo venía de escribir una monografía sobre la muerte anunciada. Honesto sí, suicida, no.

Esta semana la cuenta de implicados por el desfalco de Interbolsa ascendió a 37 personas, entre las que se incluyen todos los responsables de haber controlado a la empresa. No hubo un solo enemigo del pueblo que se parara ante los planes inflacionarios del doctor Rodrigo Jaramillo y sus secuaces. Por las actas se sabe que el comité de riesgos sí prendió todas las alarmas pero no dio el paso definitivo para desarmar el plan de Jaramillo. Todos lo hacen imagino que escucharon las voces disonantes que alertaron sobre la desgracia y el riesgo de inflar la acción de Fabricato.

Ibsen escogió Un enemigo del pueblo como título de su obra. Todos lo hacen bien podría ser un excelente título alternativo.

The Man, 15. García Márquez o sobre un estado del alma

Gabriel García MárquezHe sufrido el síndrome de don Quijote varias veces en mi vida. En una de ellas, la lectura de La República de Platón, los Escritos políticos y El juego de los abalorios de Hermann Hesse me llevaron a estudiar Ciencia Política. A grandes líneas, de La República me encantó la idea del político como médico del Estado, de la política como el arte de lograr el bienestar de la sociedad; de los Escritos políticos aprendí una visión amplia y solidaria ante los males que se ciernen sobre la sociedad; y de El juego de los abalorios me contagié de la mística de la formación y el aprendizaje. La realidad no tardó mucho en destrozar mis lecturas.

El departamento de Ciencia Política de la Universidad de los Andes carecía por completo de esa mística que yo le daba o buscaba en un alma mater; su pensum había sido elaborado por otros padecientes del síndrome de don Quijote, quienes tenían toda la visión del Estado formada por la teoría europea y poco o nada relacionada con la realidad colombiana; y muchos de sus profesores recitaban con gran solemnidad las hojas amarillentas o plastificadas de sus cursos.

Me salvaron las opciones en historia, literatura y filosofía. Viví una epifanía en una charla del profesor Manuel Hernández sobre García Márquez como chamán del Estado colombiano. El profesor Hernández hacía un recorrido por la obra de García Márquez, sus últimas pronunciaciones sobre la realidad colombiana, para mostrarnos una visión del país sorprendente. Ese día descubrí una forma de comprender a Colombia que nunca había oído y mucho menos imaginado.

(Sigue leyendo »»)

Semana de conspiración (2)

Posibles trayectorias del vuelo MH370

Posibles trayectorias del vuelo MH370

Los creadores de teorías de la conspiración no descansan. Nos legaron esta semana dos teorías conspirativas sobre el MH370. Una propia de la ciencia ficción, la segunda del terror.

Teoría 1.

En 1994, un segmento de la oposición antimonárquica e independentista malaya no tuvo más remedio que huir del país so pena de ser encarcelados por órdenes del rey. Como ningún país aliado quiso recibirlos decidieron fundar su propia versión de Atlantis en el océano Índico. En el MH370 viajaba una delegación de diez científicos chinos expertos en energía hidráulica. El ejército rebelde decidió secuestrarlos y desviaron el MH370 hacia su refugio en el Índico.

(Sigue leyendo »»)

The Man, 14. Paco por siempre

Paco de LucíaDe mis momentos inolvidables preferidos destaco sobre todo aquellos que abren puertas, que son como epifanías. Como la lectura del primer párrafo de La metamorfosis, de Kafka, el universo que abre en un acto de magia. O Entre dos aguas, del maestro Paco de Lucía, que escuché cuando tenía alrededor de 14 años y me abrió el universo del flamenco nuevo.

A partir de ese momento empecé a interesarme en el flamenco, a amar el cante jondo, con la misma pasión con la que la shakuhachi, el koto, los ninjas y samurais me llevaron a descubrir la cultura antigua japonesa.

He asistido cuatro veces al festival de flamenco de Jerez de la Frontera y una a la Bienal de Sevilla. De mi última visita a Jerez recuerdo sobre todo la cantidad de japonesas aprendiendo el baile. Luego me enteré de la fiebre por el flamenco en Japón, donde hay más de 600 escuelas de flamenco. ¿Cuál es ese vaso comunicante entre Japón y Andalucía?

Probablemente la emoción profunda que transmite la música. Es increíble escuchar a japoneses tocando con duende, pero quizás por su tradición milenaria sus corazones estaban preparados para recibir el flamenco.

Paco desató una revolución que congregó a muchos nuevos seguidores, sobre todo a músicos que se lanzaron a descubrir las posibilidades del nuevo mundo. De paso por Algeciras, la ciudad donde nació Paco, sorprende su tradición. La misma que cultivaba Paco en sus primeros años como músico. Por esos misterios insondables de la creatividad dio con Entre dos aguas y la milenaria Andalucía empezó a sonar diferente. Los atardeceres en Cádiz o Almería, en Granada o en el Cabo de Gata, son otra historia con el sonido del nuevo flamenco.

Vivo horas felices escuchándolo, sintiéndolo, visualizando la luz andaluz, el ambiente, la gente. La revolución de Paco fundó una nueva Andalucía, que es la que yo llamo mi patria espiritual. Esto, ni más ni menos, es lo que le debo a Paco. Descanse en paz, Maestro.

La memoria de Shakespeare 2.0

Dentro de mi propia teoría conspirativa de cómo Borges prefiguraba ya los flujos de información en la era digital le llegó el turno a La memoria de Shakespeare. Siempre que escucho o veo algo hermoso, algo que me estremece, me pregunto qué estaba pasando en la vida del autor para crear esa obra. Pocas veces he tenido la oportunidad de preguntárselo al autor. Una de ellas fue en la Universidad, cuando la Orquesta Aragón estuvo visitando a los estudiantes del Conservatorio. Fue la primera vez que vi a César Pagano: su forma de vestir me dijo que tenía que ser él, alguien que parecía recién escapado de Juanchito con sus zapatos y traje blanco. En la ronda de presentaciones confirmaron que era él. En la rueda de preguntas, no me contuve: «¿Quién es el compositor de Mi bajo con tumbao?».

(Sigue leyendo »»)