En mi corta vida democrática neerlandesa he votado por el Partido Laboral (PvdA), el Verde (Groenlinks) y el Socialista (SP). Después del comunicado de Jeroen Dijsselbloem condenando la victoria del Oxi en Grecia y que aún siga en el cargo ha puesto en el congelador mi voto por el PvdA durante los próximos 5 años al menos. Empiezan a tener razón las voces críticas que hablan de la Unión Europea como la dictadura neoliberal en manos de la banca, con pseudo socialdemócratas como Dijsselbloem totalmente entregados a ella.
Le comenté a un amigo griego que estaba sorprendido por el increíble número de periódicos en los kioskos en Grecia. Él me dijo que en su mayoría eran regulares tendiendo a malos, pues les pertenecen a los mismos oligarcas dueños de los demás grandes medios de comunicación. Fue tan sorprendente la presión que ejercieron por el Sí que se temía un empate. La victoria del No fue categórica. Solo algunos periodistas independientes que hicieron sus propios sondeos en la calle dijeron que el pulso en la calle le daba la victoria al No.