XI

Alejandro amaneció muy débil, pálido, casi sin fuerzas. Traté de hacer una llamada de rescate con los celulares que trajimos pero mientras buscaba cobertura, se descargaron las baterías, como si la Laguna Negra también estuviera absorbiendo su energía (¿o un pequeño bocado de la mano invisible?). Estoy tomando su pulso cada hora y he encendido un círculo de antorchas alrededor de la carpa para evitar que gaste energía calentándose. Contra mi voluntad tuve que cortar 4 frailejones de casi dos metros para mantener vivo el fuego alrededor de la carpa. Balbucea cosas incoherentes y así es imposible moverlo de acá. No sé si esperar un día más o salir de inmediato a buscar ayuda con los campesinos de la región. Montegat no es una opción en este momento: estamos a 2 días de camino sin equipo.